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AGENCIAS El presunto cerebro de la célula en Cataluña tuvo contacto con un condenado por el 11-M en prisión.Según fuentes próximas al operativo, este individuo, de 45 años de edad, es un salafista radical y, por edad y perfil, podría haber actuado de líder del grupo .Desde que el imán comunicó que dejaba el país inicialmente nadie se había vuelto a cruzar con él, pero su compañero de piso mantiene que le vio el martes.Los Mossos confirman que falleció en la explosión de la casa de Alcanar.Estuvo en la cárcel, donde cumplió condena hasta abril de 2014 por tráfico de drogas y cuestiones relacionadas con la legislación de extranjería.Además, habría tenido relación con detenidos por el 11-M, según informa 'El País'.FOTOGALERÍA: Los rostros de los detenidos por los atentados en Cataluña.Los Mossos d'Esquadra han confirmado que el imán de Ripoll a quien se investigaba por los atentados de Cataluña, Abdelbaki Es Satty,murió en la explosión de la vivienda en Alcanar donde la célula terrorista prepara explosivos para usarlos en el atentado en Barcelona.Lo ha confirmado el jefe de los Mossos, Josep Lluis Trapero, al comparecer ante la prensa para informar de la muerte de Younes Abouyaaqoub, presunto autor material del ataque.La principal hipótesis de los investigadores es que el imán desempeñó un papel clave en la radicalización de los otros once integrantes de la célula, integrada por jóvenes residentes en la localidad gerundense de Ripoll.El cuerpo policiaco autonómico ya tenía muchas evidencias de que era uno de los dos cadáveres que se encontraron entre los restos de la casa de Alcanar. Pero este lunes lo han confirmado las pruebas de ADN.Es Satty, de 45 años de edad, era un salafista radical y, por edad y perfil, podría haber actuado de líder del grupo terrorista. Ejerció como imán hasta el pasado junio, cuando anunció que se iba tres meses a Marruecos de vacaciones, aunque la persona con la que compartía piso, Nourden Elhaji, asegura que lo vio por última vez el martes.Así, las fuerzas de seguridad han hallado la furgoneta del imán a 15 kilómetros de la localidad de Alcanar (Tarragona), donde se ubica el chalé que explosionó el pasado miércoles y que servía de base de operaciones de la célula yihadista de los atentados en Cataluña.El chalé servía supuestamente de base de operaciones de la célula, la cual llevaba alrededor de seis meses preparando un atentado inminente en Cataluña, que habrían acelerado después de la deflagración con el atropello masivo en las Ramblas de Barcelona y el incidente en Cambrils.Fuentes de la investigación también han destacado los vínculos internacionales del imán de Ripoll, quien radicalizó supuestamente a los jóvenes de la célula. Así, Es Satty viajó varias veces (en alguna ocasión por seis o siete meses) a la localidad belga de Vilvoorde, que se caracteriza por la gran cantidad de población salafista que alberga.Referente religiosoAbdelbaki Es Satty predicaba para la comunidad islámica Annur de esta localidad gerundense, en la que residía el grueso de la célula terrorista, y su secretario, Hammou Minhaj, ha explicado que desde que el imán comunicó que dejaba el país inicialmente nadie se había vuelto a cruzar con él. Sin embargo, su compañero de piso sostiene que lo vio el martes pasado y, en todo caso, tanto él como Minhaj insisten en que es una persona "muy normal", si bien este último puntualiza que su carácter es "un poco tímido, un poco cerrado".El presidente de la comunidad en la que Abdelbaki Es Satty ejercía como imán desde que abrió a principios de este año, Ali Yasine, ha informado de que lo escogieron porque es "muy complicado encontrar un imán en esta zona y él estaba libre".Abdelbaki Es Satty ya había sido referente religioso de otro colectivo musulmán de Ripoll, compuesto por una cuarentena de personas, durante siete meses de 2015, hasta que decidió dejarlo por razones que se desconocen.Años antes de esto, cumplió cuatro años de prisión en la cárcel de Castellón por tráfico de hachís y cuestiones relacionadas con extranjería, según han informado fuentes de la investigación. Fue sorprendido en 2010 en un ferri entre Ceuta y Algeciras con un cargamento de hachís, que finalizó con su condena por tráfico de drogas. Estas fuentes han precisado que fue condenado a cuatro años de cárcel en 2010, condena que cumplió hasta abril de 2014, tal como ha confirmado el conller de Justicia, Carles Mundó.Vinculado con el 11-MAdemás, se vincula a Es Satty con detenidos por el 11-M, podría haber tenido relación con ellos, según informa una periodista de El País. El imán coincidió en la prisión de Castellón con Rachid Aglif, alias El Conejo, condenado a 42.992 años por los atentados de 2004. Y es que Es Satty organizaba los rezos de los presos musulmanes, entre ellos Aglif.Asimismo, se ha conocido a través del mismo diario, que pasó en Bélgica un tiempo durante 2016: acudió a pedir trabajo y no fijó su residencia, tal como informaron las autoridades de la localidad de Vilvoorde.Tanto el presidente como el secretario de Annur han insistido en que Abdelbaki Es Satty era una persona dentro de los parámetros habituales y que "la gente estaba satisfecha con él".Los jóvenes terroristas estuvieron en la mezquitaDesde que comunicó que se marchaba de vacaciones tres meses a Marruecos, esta comunidad ha seguido su actividad habitual sin imán y son sus integrantes quienes se reparten la gestión de la mezquita.En Annur también han confirmado que alguno de los jóvenes acusados como presuntos autores del atentado se habían dejado ver en alguna ocasión por la mezquita, pero que ya hacía un tiempo que no aparecían.Tras el registro de esta pasada noche en el piso de la calle Sant Pere de Ripoll, donde vivía el imán, su compañero de piso, Nourden Elhaji, ha indicado que Abdelbaki Es Satty era originario de Tetuán (Marruecos) y tiene unos 45 años."Era una persona normal", ha insistido este testimonio, que ha residido en el mismo domicilio que Satty durante los últimos tres meses.Sobre los jóvenes a quienes se acusa como autores del atentado en Barcelona y Cambrils, Elhaji ha confesado haberlos visto alguna vez por Ripoll, pero nunca en el piso compartido con el imán.La comunidad Annur ha querido condenar los hechos ocurridos el pasado jueves a través de un manifiesto que ha colgado en la entrada de la mezquita, en el que se puede leer su total "compromiso en la lucha contra cualquier tipo de terrorismo" y sus ganas de que "los responsables puedan ser detenidos y llevados ante la justicia lo más pronto posible".

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