Valencia-Barça. Guardiola arriesga, defensa de tres. Abidal marca en propia puerta, mazazo. Un minuto después, Pedro empata. Mayor capacidad de reacción, imposible. En los madriles, la alegría dura eso, sesenta segundos. Penalti a Messi que no se pita. ...Leer todo el artículo »Sport
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